viernes 12 marzo 2021
El Laboratorio de Geoestadística y Supercómputo, perteneciente al AMTC y al Departamento de Ingeniería de Minas de la Universidad de Chile, ha establecido un convenio de colaboración con el Centro de Información de Recursos Naturales (CIREN) para optimizar el trabajo de esta institución en temas climatológicos.
En concreto, el convenio permite al Laboratorio proveer al CIREN de modelos espacio-temporales que pueden usarse para estimaciones complejas, como por ejemplo variables de interacción entre clima y suelo en situaciones de lluvia o erosión. A cambio, el Centro facilita los datos para la construcción de dichos modelos y el conocimiento experto para validarlos.
La colaboración se originó en el deseo de dar uso a una técnica llamada LVA (anisotropía variable localmente), desarrollada por el Laboratorio gracias a un proyecto Fondef y diseñada para realizar modelamientos y estimaciones en espacios muy complejos, con condiciones cambiantes. “Si se quiere modelar, por ejemplo, cambio climático o polvo en constante movimiento, el LVA es la técnica útil para eso”, explica Álvaro Egaña, director del Laboratorio de Geosestadística y Supercómputo. “Cuando hablamos de modelos espacio-temporales, lo que hacemos es mezclar la geoestadística, que es una disciplina de un ámbito muy espacial, con la historia hacia atrás de lo que estamos estudiando. Unir el tema espacial, que es lo que más hacemos, con lo temporal fue una novedad para nosotros, y la técnica LVA nos permite analizar fenómenos muy complejos que van variando a medida que pasa el tiempo, como por ejemplo temas de agroclima”, detalla el investigador Gonzalo Díaz.
“De hecho, veníamos con la idea inicial de trabajar en modelos relacionados con polvo, emisiones, gases de invernadero, pero en CIREN nos presentaron otros problemas climáticos, más relacionados con el suelo, en donde ellos carecen de modelos robustos y donde no se ha trabajado tanto, así que se generó una colaboración ideal. Juntos podemos generar mejores estimaciones en erosión de suelo, lluvias y otras variables”, expresa el investigador Felipe Navarro.
“La idea es que nos convirtamos en proveedores de modelos para CIREN”, complementa Álvaro Egaña.
En el trabajo con CIREN también participa el investigador Miguel Lagos, del grupo de investigación AMTC sobre agua y sustentabilidad ambiental, por lo que el convenio representa una verdadera colaboración interdisciplinaria.